En pocas semanas la intención de anular el voto el próximo cinco de julio ha cobrado una fuerza inesperada. Hoy el periódico "Reforma" publica las declaraciones de Dulce María Sauri, expresidenta nacional del PRI, exgobernadora y exsenadora que se pronuncia en ese sentido. Hay quien dice que anular el voto es facilitar el triunfo de los partidos mejor organizados en el "acarreo" de votantes y con sólido voto duro como precisamente el PRI. Aquí lo importante es que seamos en verdad mayoría quienes anulemos el voto; seguramente habrá votos y finalmente se elegirán diputados, asambleístas, jefes delegacionales y gobernadores, pero será con un mínimo de votos lo que si no formalmente pero sí en la percepción ciudadana, los deslegitimará, pero lo más importante, las obcenas franquicias usufructuadas impúdicamente por Elba Esther Gordillo (PANAL), Alberto Begné (Social Demócrata), Alberto Anaya (PT), Dante Delgado (Convergencia) y la familia Gonzáles Torres (Verde) perderán su registro, eso ya es un logro. Nos quedan días para tomar una decisión.
Saludos, Alfonso. Así es, totalmente de acuerdo contigo. Nuestro derecho al voto no debemos dejar de ejercerlo, ni siquiera cuando las alternativas no son de nuestro agrado, y ésta que propones es una manera de expresarlo, de protestar. Un fuerte abrazo, amigo.
ResponderEliminarCuidado Alfonso.
ResponderEliminarYo tenía esa misma opinión hasta que leí un artículo en "Enfoque" del Reforma. En vez de perjudicar a la chiquillada, la anulación de votos los va a beneficiar... No me extrañaría que ya viendo bien las consecuencias, sean ahora ellos mismos los que llamen a anular los votos.
http://www.reforma.com/enfoque/articulo/502/1002679/default.asp?plazaconsulta=reforma&EsCobertura=true&DirCobertura=Suplementos/enfoque&TipoCob=2
Gracias Javier,vamos a revisar el material que enviaste, saludos.
ResponderEliminar