versión móvil

lunes, 9 de marzo de 2009

Crímen y política.


A raíz de la visita oficial que el presidente francés Nicolás Sarkozy comienza hoy en nuestro país se ha levantado una ola de repudio a la posibilidad de que la francesa Florence Cassez, condenada a sesenta años de prisión por secuestro, sea repatriada para purgar su condena en Francia, donde su caso es ya célebre. Si Sarkozy intercede y logra la repatriación conseguirá dar un golpe político y mediático en su país pero el daño a la credibilidad de nuestras autoridades sería devastador, en momentos en que la lucha contra la inseguridad y la delincuencia son la principal bandera. No obstante, el artículo 18 de la Constitución establece que es posible que sentenciados extranjeros en nuestro país puedan ser enviados a su patria a purgar allá su condena.

No hay comentarios: